Tengo ganas de guardar todas tus palabras, sin olvidarme ninguna. Cada detalle de tus pensamientos que me envías a través de palabras escritas. A través de ellas puedo sentir tu deseo tan cerca, como si estuvieras aquí, como si estuvieras en mí. Pero estás tan lejos, mi amor.
Me miras desde lejos y es como si estuviera delante de ti, pero sin respiro, sin olor, sin sabor... Y respiro tan hondo, huelo a hembra y a chocolate y tengo el gusto porque esperas.
No consigo saber en qué momento empecé a quererte, a desearte. Pienso y no logro acordarme el momento en que te hiciste tan presente y necesario. Pero te hiciste, aunque a miles de quilómetros, aunque no tengas todavía respiro, olor ni sabor.
original hecho 27/05/2011.
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